sábado, 25 de enero de 2014

Capitulo 2.


POV Fani: La chica que iba con ellos se puso a hablar con él mientras el resto hablaba, y a los minutos se pusieron a hablar con el resto del grupo y dejó de mirarme. Me terminé el chocolate y me fui a mi casa.
Al llegar deshice la maleta y después miré el reloj. Vi que eran las 20:00h así que le pregunté a Nerea si podía ir a verla.


'¿Puedo ir a tu casa y hablamos?'

'Claro :)'


Cogí un abrigo fino y fui a su cada andando puesto que vivía dos calles mas abajo. Al llegar llamé al timbre, me abrió y fuimos al salón.



— Fani -dijo abrazándome- ¿que tal tus vacaciones? 
— Genial, necesitaba desconectar un poco de todo, ya sabes. 
— Me alegro de que estés mejor -me dijo frotándome el brazo en señal de apoyo.
— Y bueno, ¿que tal el vuelo? -continuó 
— Bastante bien la verdad -sonreí al recordar al chico del aeropuerto.
— ¿Y esa sonrisita? -dijo Nerea 
— Pues.... 
— ¿Has conocido a alguien? -preguntó emocionada
— Mas o menos, pero no es nada del otro mundo -aclaré 
— Venga, cuéntame -dijo impaciente. 
— Ni si quiera le conozco, fuimos sentados al lado en el avión., luego choqué con él en el aeropuerto, y luego me encontré con él en una cafetería -hice una pausa- me sonrió, le sonreí, y estuvo mirándome de reojo un par de veces
— ¿Y como se llama? 
— No lo se... 
— Tal vez le veas alguna vez más, si ha ido a esa cafetería significa que vive por aquí cerca. 
— O que ha ido a ver a unos amigos y ya no le veo mas. Además, no veo que importancia tiene el verle mas o no.
— Ya pero... Podrías tener una nueva oportunidad en el amor, y si el destino le ha puesto en tu camino es por algo. 
— ¿Siempre tienes que decir algo del destino? 
— Si, por que si lo ha puesto en tu camino será por algo.


POV Becky:

Estaba en mi casa, sentada en el sillón viendo una serie en la televisión cuando me vino a la mente la conversación que tuve con Álvaro ayer.

No entiendo como pudo hablarme de su hermana, creía que sabia que no nos soportábamos, por favor, ¡su hermana pensaba que intentaba separarle de sus amigos y familia! Después de que su hermana me criticase va él y me cuenta que su hermana tal vez se case... ¿Pero a mi eso que me importa?

Y encima me dijo que si se casa le tocará ir solo por que no estamos juntos y que le costaba decir eso ultimo... Él había roto conmigo, fue hace muchísimo tiempo y ahora soy su mejor amiga... ¿De verdad le cuesta hablar de nosotros? Y él es el primero que dice lo de pasado pisado... Pues al parecer no se lo aplica a él mismo...

Y luego me contó que había conocido a una chica en el aeropuerto y que el muy tonto se había confundido de maleta con la de esa chica, y luego en la cafetería la vimos... La verdad es que la chica es muy mona, y Álvaro no paró de mirarla en todo el rato que estuvimos en la cafetería... Creo que la chica se dio cuenta mas de una vez... Cuando quiere Álvaro es muy cantoso... Pero la chica no se quedó atrás, cada vez que él le miraba ella le sonreía...

Estaba sumergida en mis pensamientos cuando me llegó un WA. Cogí el móvil y lo miré, era Blas.

'Becky, ¿puedes venir a mi casa? Es urgente por favor'

¿Qué le habría pasado? ¿Qué era tan urgente? Me apresuré en contestarle.

'Claro, en 15 minutos estoy allí'

Me levanté del sillón, cogí mi chaqueta, me abrigué bien y salí de casa. Al pisar la calle una bocanada de aire me golpeó la cara, se empezaba a notar bastante que el invierno estaba cerca.
Camine hasta su casa, quedaba lejos y al saber que era urgente apresuré mis pasos. Llegué antes de lo que había previsto, si, había partes en las que había corrido para llegar pronto y estaba exhausta. Llamé al timbre y a los segundos Blas me abrió con los ojos rojos. Cuando le vi así, sentí una punzada en pecho, no soportaba verle mal. Seguro que la zorra de su novia le había hecho algo. No entiendo por que le hacía sufrir tanto si Blas era la mejor persona del mundo, ella no se le merecía.

— Blas, ¿qué te ocurre? -le pregunté preocupada. Él me abrazó, le respondí al abrazo, apoyó la cabeza en mi hombro y se puso a llorar.- Blas, tranquilo, dime que pasa. -dije acariciando su espala para que se calmase, y a los segundos se separó de mi y cerró la puerta.
— Vamos al salón y te lo digo...dijo, y le seguí hasta el salón, donde se sentó en el sofá y yo a su lado.
— Ahora, dime que te ocurre, no me gusta verte así.
— Es Silvia... me... me ha engañado...
— ¿Engañado?
— Si, con otro... les he pillado en la cama y...-dijo sin poder continuar puesto que había roto a llorar de nuevo, apoyándose en mi hombro.
— Blas yo... lo siento mucho... ella no te merece... ni merece una sola de tus lágrimas -dije mientras le abrazaba.
— Ya pero... es muy duro...-dijo susurrando en mi cuello mientras intentaba dejar de llorar.
— Sé que es duro pero... tienes que sonreír, ella no sabe lo que se ha perdido al hacerte esto.
—Muchas gracias Becky...- dijo mientras se separaba de mi.- siempre sabes como ayudarme...
—Tú siempre me has ayudado... lo mínimo que puedo hacer es ayudarte... Y para ayudarte, lo que vas ha hacer es darte una ducha para despejarte y cambiarte de ropa, que nos vamos a ir.
—¿Ahora? ¿A donde?
—Si, ahora, y eso ya lo sabrás luego, ahora ve, venga.

Blas se fue a duchar y cambiarse, yo me quedé esperándolo en el salón, pasaron unos minutos cuando el móvil de Blas comenzó a sonar, estaba en la mesita del salón, le eché un vistazo y vi que era Silvia, no me lo pensé dos veces y contesté, esa zorra se iba a enterar.

*Conversación telefónica*

— Blas, lo siento mucho... solo fue esa vez, te lo juro... perdóname.-dijo Silvia al otro lado de la línea.
— Eres una zorra. ¿Engañas a Blas y ahora le llamas para decirle eso? Tú no tienes vergüenza. Haznos un favor a todos y déjale en paz, no le mereces, el es un tío de puta madre y se merece algo mejor que tú, que solo sabes joder.
— ¿Por que has contestado tú el teléfono? ¿Y Blas?
— Oh, ¿ahora él te importa?
— Mira estúpida, pasame con él, y todo lo que has dicho te lo guardas, que para zorra ya estas tú, que estuviste con uno de sus amigos y ahora vas de mejor amiga de todos ellos solo por conseguir algo de fama.
— ¿Segura? Por que lo mío con él fue mucho antes de que fueran famosos, y si vamos ha hablar de quien ha estado con alguno de ellos por fama mejor hablamos de ti, ¿no crees?
— Si, pero yo por lo menos lo he conseguido.
— Mira, eres una mierda de persona, vete a la mierda y no vuelvas a llamar a Blas, ¿Entendido?
— ¿Y que me vas a...-la colgué, no la soportaba.

*Fin de la conversación telefónica*

— Gracias...-dijo Blas apoyado en el marco de la puerta del salón.
— Blas... ¿Te ha molestado que lo coja? Necesitaba decirle a esa lo que pensaba...
— No, tranquila. Gracias por decirle eso. Me alegra saber que piensas así de mi y que puedo contar contigo para decirle todo eso a ella.
— No es nada... bueno, ¿Vamos? -le dije mientras me levantaba del sofá.
— Claro, vamos -dijo, cogió su chaqueta y salimos de su casa.

sábado, 11 de enero de 2014

Capitulo 1.


POV Fani:

Ya estaba de vuelta en Madrid, después de mis pequeñas y merecidas vacaciones, necesitaba desconectar de todo un poco y por suerte lo habia conseguido pero ahora tocaba volver a la rutina.
Fui a buscar las maletas cuando me choqué con alguien.
Le miré y vi que era el chico que había estado sentado a mi lado en el avión, nos pedimos perdón mutuamente por chocar y fui a coger mi maleta pero él fue a coger también la mía. 

— Esa es mi maleta -le dije. 
— No, es la mía.
— No, lleva siendo mía desde que la compré.
— Es la mía, la reconocería en cualquier lado.
— Es la mía, a no ser que te llames Fani y hayas puesto tu nombre en el asa, se ve que es mía - respondí  y él miró el asa y vio que ponía mi nombre.
— Oh lo siento... la mía es esa -dijo señalando otra maleta como la mía y fue hacia ella

Cogí mi maleta y me fui del aeropuerto, pedí un taxi y me fui a casa. Al llegar me di una ducha, me cambié de ropa y fui a dar una vuelta. Llegué a mi cafetería preferida, me pedí un chocolate caliente y me senté en una mesa al principio de la cafetería en el que las vistas daban a un parque infantil. 
Me puse a tomarme el chocolate mientras miraba mi móvil. Escuché la puerta abrirse y miré hacia ella.De nuevo ese chico, me miró y me sonrió y le devolví la sonrisa.
Me fijé en que iba con cuatro chicos mas y una chica. Fueron a pedir algo y se sentaron en la mesa que había a mi lado. Él no paraba de mirarme de reojo y de sonreírme mientras hablaba con sus amigos.

POV Álvaro:

Ya estaba de vuelta en Madrid, había estado en Canarias una semana, había ido a ver a mi hermana, ya que hacía tiempo que no la veía y la echaba de menos. Iba a recoger las maletas cuando choqué con alguien. La miré y vi que era la chica que había estado sentada junto a mi en el avión. Nos pedimos perdón mutuamente y fui a coger mi maleta, pero ella también fue a coger la mía.


— Esa es mi maleta -me dijo. 
— No, es la mía. 
— No, lleva siendo mía desde que la compré.
— Es la mía, a no ser que te llames Fani y hayas puesto tu nombre en el asa, se ve que es mía.- respondió, miré el asa y vi que ponía su nombre
— Oh lo siento... la mía es esa -dije señalando otra maleta como la suya y fui hacia ella.

Cogí mi maleta y me fui a casa. Deshice la maleta y me di una ducha. Cuando salí abrí el grupo de WA que tenía con los chicos y les mandé un mensaje. Quedamos en un rato en una cafetería cercana. Me quedé pensando unos segundos, volví a coger el móvil y le mandé un mensaje a Becky.

'Becky, ¿Puedo ir a tu casa? Tengo que hablar contigo'

'Claro, aquí te espero :)'

Cogí una cazadora y salí de casa. En unos diez o doce minutos ya había llegado a casa de Becky.


— Estuve con mi hermana, está genial con su novio, parece que esta vez la cosa va enserio, me dijeron que estaban pensando en casarse pero que eran muy jóvenes todavía... yo les dije que llevando tantos años juntos eso tendría que darles igual, y bueno están pensándolo y si al final se casan me tocara volver a Canarias para la boda pero tendré que ir solo por que tu y yo ya... ¿me estas escuchando?-le pregunté por que ni me había mirado. 
— ¿Eh? lo siento Álvaro... sabes que el tema de tu hermana... pero... ¿que me estabas diciendo de su boda y de nosotros? -me preguntó mirándome.
— Nada. Que si al final se casa me toca volver a canarias y solo por que... bueno, nosotros... — No estamos juntos. No entiendo por que te cuesta tanto decirlo después de todo este tiempo, teniendo en cuenta que además rompiste tu conmigo. — Ya pero no se... me cuesta decirlo y hablar de esto contigo... mejor vamos ya a la cafetería... — Esta bien, vamos. -dijo, y cogió una chaqueta para resguardarse del frío y del aire y fuimos andando a la cafetería. -Bueno ¿y que tal el vuelo?-preguntó al salir de su casa.
—Bien. Fui sentado al lado de una chica bastante guapa y luego...
—¿Y luego?
— No te rías pero... confundí su maleta con la mía -vi que intentaba no reírse pero no podía.-Ríete venga, pero las maletas eran iguales. — ¿Y al final como supiste que no era la tuya? -preguntó mientras parábamos en un semáforo en rojo. — Ponía su nombre en el asa. —En esas cosas hay que fijarse Álvaro.
—Oh claro, tu ves una maleta como la tuya y te fijas en el asa.-dije mientras avanzábamos por el paso de cebra y giramos para quedarnos en la puerta de la cafetería para encontrarnos con los chicos. — Hola chicos.-dijo Blas llegando.
— Hola -dijo Becky mientras le daba un beso en la mejilla.
— Hola tío.-dije y chocamos las manos a modo de saludo.
— ¿Lleváis mucho esperando? -preguntó Blas.
— No, por poco llegas tu antes que nosotros. — ¿Que hay chicos? -preguntó Carlos llegando y dando dos besos a Becky. — Hola Carlos.-le dije, y chocamos las manos como anteriormente había hecho con Blas.
— ¿Y el resto? -preguntó mirándonos. — Vendrán ahora -dijo Becky mientras bajaba las mangas de su chaqueta para abrigarse mas.
—¿Tienes frío? -le preguntó Carlos. — Un poco, pero no es nada -respondió.
— Hola chicos -saludó a Dani y a David, que acababan de llegar.
— Hola -dijo Dani y le dio dos besos a Becky y saludó a los chicos como anteriormente nos habíamos saludado el resto, y David repitió sus pasos.
— ¿Entramos? -preguntó e inmediatamente después todos nos dirigimos a la entrada.
Y ahí estaba ella, la misma chica del aeropuerto. No pude evitarlo y la sonreí Y ella me devolvió la sonrisa. Nos pedimos todos un café caliente menos Becky y David que se pidieron un chocolate caliente. Nos pusimos A hablar de cosas sin importancia y yo de vez en cuando miraba a aquella chica, hasta que Becky me habló. — Álvaro ¿por que miras tanto a esa chica? -me preguntó.
— ¿Que? ¿Que chica? -dije haciéndome el desentendido. 
— No te hagas el tonto, esa chica, la que está en la mesa de al lado. 
— Ah... esa chica... bueno es que... es la chica del aeropuerto. 
— No mentías cuando decida que era guapa... 
— ¿De que habláis? -intervino David. 
— Oh de nada... -dije y volvimos ha hablar Becky y yo con el resto.